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De un vistazo

Compuesto: 1953

Duración: Duración: c. 23 minutos

Orquestación: flautín, 3 flautas, 2 oboes, 3 clarinetes (3º=clarinete bajo), 3 fagotes (3º=contrafagot), 4 trompas, 4 trompetas, 3 trombones, tuba, timbales, percusión (xilófono, clave, tamburo, panderta, triángulo, platillos, maracas, redoblante y bongos), arpa, piano, celesta y cuerdas

Primera actuación de la Filarmónica de Los Ángeles: Primera actuación en Los Ángeles: 30 de septiembre de 2022, Gustavo Dudamel  dirigiendo.

Sobre esta pieza

Nacido en España en el seno de una familia de músicos, Julián Orbón fue dos veces emigrante a regañadientes, primero a Cuba con su familia como consecuencia de la Guerra Civil española, luego a México y, finalmente, a los Estados Unidos tras la Revolución Cubana. A través de todos sus viajes, estudios (incluyendo el trabajo con Aaron Copland en Tanglewood en 1946) y desarrollo como artista, Orbón conservó su afecto formativo por el neoclasicismo español de Manuel de Falla, componiendo muchas obras inspiradas en la música anterior.

Esto es bastante evidente en las Tres Versiones Sinfónicas (1953), que también sugieren algo de la gama de intereses de Orbón. La primera es -o era- una majestuosa pavana del siglo XVI para vihuela de Luis de Milán; la segunda se inspira en la melismática polifonía parisina del siglo XII de Pérotin; y el final se inspira en una danza afrocaribeña implacablemente atlética, con una melodía tradicional que lleva el xilófono. "Versiones" es una bonita palabra para estas piezas, que no son arreglos, ni siquiera variaciones, salvo en el sentido más amplio. Se trata más bien de ajustes libremente recompuestos de algunos aspectos del material original, completamente reimaginados para orquesta: ese adjetivo "sinfónico" es definitorio, ya que las tres son impresionantes ejemplos de virtuosismo orquestal, tanto en su concepción como en su ejecución. -John Henken